martes, 30 de septiembre de 2008

LECTURAS DEL VERANO

Me gusta leer. Me gusta coger un libro y leerlo lo más seguido posible; por eso leo especialmente en época de vacaciones.
Me propuse leer cuatro libros en los meses de Julio y Agosto y .... reto conseguido: han sido cinco. Os aconsejo que si aún no habéis leído estos títulos, lo hagáis; son lecturas interesantes, entretenidas e incluso con mensaje.
¿De qué libros estoy hablando? Os haré una pequeña reseña de cada uno de ellos para no aburriros:

COMETAS EN EL CIELO, de Khaded Hobseini. Es una novela donde aparece el amor, el honor, la culpa, el miedo y la seducción, dice una gran escritora como es Isabel Allende. Ambientada en el Kabul de 1975, que no podía imaginar los períodos más cruentos que se iban a producir en el país. El autor cuenta la historia de Amir y de Hassan; de su gran amistad a pesar de ser el segundo un hazara, de una clase inferior y cómo esta amistad se rompe por una traición de Amir.He visto la película y, a pesar de que está bien hecha, omite muchos pasajes del libro. Sin duda el libro es mucho mejor.


EL NIÑO CON EL PIJAMA DE RAYAS de John Boyne.
Cuenta la historia de un niño de nueve años cuyo padre es comandante de un campo de concentración nazi. Desde su dormitorio ve una valla tras la que hay muchas personas con "pijamas de rayas". Conoce a través de la valla a un niño del campo llamado Shmuel y entre ellos surge una bella amistad.
Es una historia conmovedora; una visión inocente e infantil de los campos de exterminio nazis.

La película es fantástica y se ajusta casi a la perfección al libro.


EL CUENTO NÚMERO 13 de Diane Setterfield. Una famosa novelista, Vida Winter, ya entrada en años y que ha vivido siempre entre mentiras, recuerdos e imaginación, pide a una joven librera que adora los libros que escriba su biografía en la que contar al fin su verdadero pasado.






TE DARÉ LA TIERRA de Chufo Llorens. Una novela ambientada en la Barcelona del siglo XI que relata la historia de un joven campesino que acude a la ciudad y logra cambiar su destino, prosperar y casarse con una joven de alta alcurnia. Una novela que consugue mezclar historia y ficción y retrata intrigas palaciegas, la ambición comercial, el poder religioso, etc.




EL PERFUME de Patrick Süskind.


Es la historia de uno de los hombres más geniales y a la vez abominables de la época, llamado Grenouille. La historia transcurre en la Francia del siglo XVII. Grenouille descubre que tiene el sentido del olfato más desarrollado que ningún otro humano. A pesar de ser el mejor elaborador de perfumes, es un ser grotesco y repulsivo y se convierte en un cruel y despiadado asesino.

viernes, 19 de septiembre de 2008

VIAJE A RUSIA ( III )

Sin duda alguna, la visita de las ciudades de San Petersburgo y Moscú, han sido el plato fuerte del viaje y como ambas son encantadoras, especialmente San Petersburgo, la sensación final es de satisfacción plena.
No voy a hacer aquí una descripción turística de estas ciudades (podéis ver algunas fotos clicando sobre la imagen del final), para eso es mejor consultar las guías impresas, pero sí me gustaría comentar algunos aspectos que me parecen interesantes.
Hace algo más de 20 años visité estas dos ciudades por primera vez y los cambios que he podido observar son impresionantes; no en los palacios, mu-seos o monumentos, sino en la forma de vida de los rusos.
Recuerdo los supermercados de entonces, con las estanterías totalmente vacías; hoy se puede encontrar de todo y en abundancia.
Recuerdo aquellas largas calles sin apenas escaparates y que no se ilumi-naban por las noches, contrariamente a las grandes e iluminadas vitrinas actuales.
Recuerdo los escasos y vetustos coches "Lada" circulando por las enormes avenidas moscovitas, pobladas hoy por millares de vehículos modernos y con frecuentes atascos.
Recuerdo el "asalto" constante de adultos y niños a los turistas intentando venderles gorros e insignias en casi cada esquina; hoy casi ha desaparecido este fenómeno.
Sin duda el país ha cambiado. Ya poco o casi nada queda de aquel macro-país comunista que se llamaba URSS y que se ha convertido en otro gran país capitalista.
Algunas cosas, sin embargo, siguen más o menos igual. Por ejemplo, siguen circulando gran cantidad de trolebuses; me atrevería a asegurar que muchos son los mismos de hace 20 años; siguen estando en sus garitas las mujeres jubiladas vigilando con el mismo celo que antaño las escaleras del metro, etc.
Quizás lo que más me llama la atención es que, a pesar de todos estos cambios, el carácter del ruso sigue siendo serio, apático, como malhumorado, a veces incluso desagradable en el trato. ¡Qué difícil es verlos sonreir! ¿Serán reminiscencias del pasado? ¿Será por el frío clima? No lo sé; de todas formas justo es decir que no tuvimos ningún problema con ninguno de ellos durante los días que permanecimos allí.

miércoles, 10 de septiembre de 2008

VIAJE A RUSIA (II)

En la entrada anterior, os mencionaba algunos aspectos que no habían satisfecho plenamente las espectativas que había puesto en el viaje; pero hay otros muchos, muchísimos aspectos positivos.
En primer lugar debo citar a nuestros compañeros de viaje; nuestro amigo y compañero Javier y su esposa, Juani.


Las comidas a bordo del barco fueron exquisitas y abundantes; con una presentación excelente, no tan solo de los platos en sí, sino el servicio en general: manteles y servilletas a juego y cada día diferentes; servilletas dobladas de una forma diferente también cada día; uniformes de los camareros; etc. He de hacer una mención especial a nuestra camarera Vika, que así se llamaba: guapa, simpática, siempre con la sonrisa en los labios (cosa rara en los rusos) ... un encanto de persona. Cuando me despedí de ella el día que abandonamos el barco, se le saltaron unas lagrimillas y he de confesar que yo también me emociné un poquillo.

Algunas actividades a bordo fueron interesantes, como por ejemplo la cata de los cinco principales tipos de vodka, clases para tocar la balalaika, aprender bailes típicos rusos, arte de doblar servilletas y alguna otra más. Por cierto, yo tuve que actuar en un "concierto de balalaika" en la fiesta de "los talentos del barco" y las mujeres lo hicieron bailando danzas típicas rusas que habían aprendido.


También fueron entretenidos y agradables los largos ratos que pasamos los cuatro jugando a las cartas en el bar cuando la lluvia no permitía hacer otra cosa o cuando Javier y yo, ya de madrugada y antes de retirarnos a dormir, observábamos desde la cubierta de proa si el barco pasaba entre las boyas iluminadas que marcaban su rumbo ..... o las esclusas, que fueron unas pocas: 19 en todo el trayecto.












Como ya he dicho, todo ello en su conjunto ha hecho que este viaje me haya encantado.

jueves, 4 de septiembre de 2008

VIAJE A RUSIA ( I )

Cuando empecé a planificar el tradicional viaje del verano, me decanté por el crucero por el río Volga entre San Petersburgo y Moscú por dos razones principales. Una, porque me gustan los cruceros fluviales y otra, porque me apetecía visitar estas dos ciudades a pesar de haberlo hecho ya hace 20 años. Así es que con mi amigo y compañero Javier y nuestras respectivas parejas, nos decidimos a hacerlo.
El viaje en su conjunto me ha encantado; no obstante, he de confesar que mis espectativas no se han visto satisfechas totalmente por diversos motivos:
- El mal tiempo que nos acompañó los cuatro o cinco primeros días (de los once del total), con lluvias diarias, que nos impidieron disfrutar en la cubierta del barco de la relajante navegación y admirar toda la belleza de las ciudades y sus monumentos.
- Largas horas de navegación; alguna etapa de casi 24 horas seguidas; y es que la distancia entre las dos ciudades es de más de 1.500 Km., a recorrer en cinco días.
- Una de las paradas intermedias no ofrece nada interesante al turista. Me atrevería a llamarla parada comercial para la compra de recuerdos y poco más.
- Las actividades a bordo parecían diseñadas para niños o personas mayores, lo que unido al tiempo lluvioso, justifican momentos de aburrimiento o de no saber qué hacer.

Mi consejo es que el viaje entre San Petersburgo y Moscú se haga en avión o en tren.

A pesar de todo, como decía al principio, hemos regresado encantados del viaje.

(Continuará la próxima semana)

lunes, 1 de septiembre de 2008

¡ YA ESTOY AQUÍ !

Hola, amigas y amigos.
Los meses de vacaciones ya se esfumaron. ¡Es increíble cómo pasa el tiempo!. Miro hacia atrás y parece que fue ayer cuando veía dos meses por delante con viaje a Rusia, con estancia en Ávila con la familia, con disfrute de playa y mar en Altafulla, con lectura en la playa bajo la sombrilla y en la terraza bajo las estrellas y ..... ya pasó.
Han sido mis últimas vacaciones laborales veraniegas; al año que viene no me veré obligado a afrontar la rutina diaria del trabajo, pues pasaré al "gremio" de los jubilados. Pero ésa es otra hitoria.
Hoy tan solo quiero saludaros a todos los que me leéis; espero y deseo que volvais con las pilas bien recargadas y .... que ninguno caiga en el tópico ése de la depresión post-vacacional. Lo importante es que estamos aquí de nuevo.
Para empezar, os pondré en un pequeño dilema. Como dije, he estado en Rusia visitando entre otras ciudades Moscú y San Petersburgo. (Ya hablaré del viaje en otro momento). Hay dos templos, entre otros muchos, a cual más bonito, uno en cada ciudad. El dilema que os presento es que me digáis cuál de los dos os parece más bonito.

A la izquierda tenéis la Catedral de San Basilio (Moscú) y a la derecha la Iglesia de la Resurrección de Cristo (San Petersburgo).